domingo, 25 de julio de 2010

Congreso extraordinario del CRIC y III Encuentro de jóvenes indìgenas
















Del 15 al 19 de julio de este año, en un sitio emblemático para los pueblos indigenas del Cauca: La Maria, territorio de paz, dialogo y negociaciòn, se realizó el Congreso extraordinario del Consejo Regional Indìgena del Cauca -CRIC-, y al mismo tiempo, el III Encuentro de jóvenes indìgenas.

El CRIC tiene una significaciòn especial por representar el origen del movimiento indígena de Colombia, por su ejercicio de resistencia indìgena, por los importantes logros que ha conseguido en los 39 años que ha alcanzado como proceso organizativo de los 7 pueblos indìgenas del Cauca, por sus valiosos aportes a la construcciòn de la paz, y por el reconocimiento nacional e internacional que ha logrado.

El congreso tenia como objetivos: realizar una evaluación interna del Cric, fijar una postura frente al bicentenario, y abordar sus iniciativas de paz. A su vez, el encuentro de jóvenes buscaba posibilitar su participaciòn en torno de su problemática actual, la evaluaciòn programa de jóvenes del CRIC, y la elecciòn del nuevo coordinador del programa.

El congreso contó con una amplia participaciòn, aproximadamente entre 8.000 y 10.000 indìgenas, la deliberaciòn fue muy enriquecedora, las conclusiones muy propositivas, y al mismo tiempo pudimos disfrutar en las jornadas de la noche, de unas hermosas expresiones culturales, representadas en danzas propias y música andina.

Se conto en la sesiòn inagural con las intervenciones de los senadores Jorge Robledo e Ivan Cepeda, quienes se refirieron al contexto nacional del bicentenario; y por parte de los indìgenas, del exsenador Jesus Piñacue, el maestro en sabiduria Alcibiades Escue, Jose Domingo Caldon, y el mayor Alvaro Tombe, quienes se centraron en el contexto histórico del bicentenario. A su vez. Juan Carlos Hutton se refirio al contexto internacional del mismo.

Durante las jornadas siguientes l@s jóvenes se tomaron la palabra para expresar sus preocupaciones y aportes, y los participantes trabajaron en comisiones para realizar la evaluaciòn interna propuesta, y en torno de las temáticas sobre: territorio, Cultura, Autonomìa, y Derechos Humanos. Luego se presentaron en plenaria y se integraron las conclusiones de las comisiones, y linalmente se sometieron a la aprobaciòn de la asamblea

Los indìgenas reconocieron que son muchos los aspectos que los unen: la recuperaciòn de las tierras, el territorio, la amenaza de los poderes económicos nacionales e internacionales sobre el mismo y sus recursos, la resistencia indìgena, la esperanza, la muerte de sus líderes y la amenaza de la muerte, y las asambleas y los distintos espacios de unidad y organización.

Concluyeron que ellos no tienen ningún bicentenario que celebrar, pues sienten que de muchas maneras, tradicionales y renovadas, el colonialismo vive, ejerce sobre ellos un impacto de negaciòn de sus culturas y derechos como pueblos, y amenaza su supervivencia, sus territorios, su autonomìa y sus procesos.

En igual forma reconocieron muchas prácticas de paz a lo largo de su historia y sus procesos organizativos, y se propusieron trabajar al interior de cada una de sus comunidades en torno de la elaboraciòn de la propuesta de paz de los pueblos indìgenas, y a su vez, articular esfuerzos con otras iniciativas de paz de base social

Al final reconocieron que nada esta terminado, su proceso continua caminando, siguiendo la huella de sus mayores, aplicando las enseñanzas de sus líderes históricos, y trabajando desde la unidad para materializar los sueños siempre presentes en los pueblos indìgenas, de dignidad, autonomìa, país justo, y derechos de los pueblos.



Notas:

1. En la foto superior, de izquierda a derecha, el Consejero Mayor del CRIC, Élides Pechené, y autoridades del pueblo Yanacona.
2. La segunda foto registra la llegada de los indìgenas al congreso, en sus tradicionales chivas.
3. La tercera foto registra parte de una sesiòn del congreso, y el humo de la tulpa, dado que el fuego siempre acompaño la jornada.
4. La cuarta foto registra la intervenciòn de los jóvenes.
5. La quinta foto registra una de las pancartas que los indìgenas presentaron en el congreso.

lunes, 5 de julio de 2010

El poder de hacer las paces


Mi compañero del doctorado en Paz, Conflictos y Democracia, en la Universidad de Granada, Juan Bautista Codorníu Solé, que es un académico y artista a la vez, escribio una linda canción, que según me contó, encontro su inspiración en las resistencias para la paz de Colombia, cuando abordabamos el tema en un seminario, y se proyectaba un documental sobre la marcha en el 2004 de los indìgenas del Cauca.

Recuerdo que Juan me dio la letra de la canción y a mi me pareció hermosa, pero entre viaje y viaje la habia extraviado, y solo hasta hace unos dìas la volvi a encontrar entre algunos documentos. Volvi a disfrutar de esta letra y de la sensibilidad de Juan, y decidi entonces publicarla en el blog, como reconocimiento a Juan y su bella creación, y por supuesto, a las resistencias para la paz de Colombia que inspiraron a Juan. Transcribo a continuación, textualmente, la bella canciòn, y queda a Juan la tarea de colocarle la música y cantarla en alguno de nuestros encuentros en torno de la Paz Imperfecta:

EL PODER DE HACER LAS PACES

"Que se nos quiera engañar
Que se nos gane
Sin que nos quiebre la voluntad
Aunque nos hielen la sangre

Que no se acabe el cariño
Que se marche la pena
Y que nunca se nos olvide
Cómo se hacen las paces

Que se nos vayan las letras
Desafinemos acordes
Que se acabe el alcohol
Y se nos haga tarde

Que se nos pase el arroz
O se nos abran las carnes
Pero que nunca se nos olvide
Cómo se hacen las paces

Aunque sea invierno
Aunque te heche de menos
Aunque se rian
Aunque nos fallen

Aunque aparezca el dolor
Aunque alguien nos falte
Pero que nunca nos nieguen
El poder de hacer las paces

Que no se acabe el cariño
Que se marche la pena
Que nunca se nos olvide
Cómo se hacen las paces

El poder de hacer las paces
Cómo se hacen las paces".

Juan, muchas gracias.....

Nota:

  • En la foto, de derecha a izquierda: Juan Bautista Codorníu Solé, autor de la canción, Edurne Aranguren, y Luis Sanchez, cuando compartíamos el año pasado en la bella Granada, en el Carmen de la Vitoria, en el encuentro del grupo de investigaciòn de paz imperfecta.